Laboral Kutxa ha presentado en rueda de prensa los informes sobre la economía vasca que elabora su Servicio de Estudios . La presentación del informe sobre la economía de la Comunidad Autónoma del País Vasco ha tenido lugar en Bilbao, a cargo de Xabier Egibar, director del área de Desarrollo de Negocio, y Joseba Madariaga, director del Departamento de Estudios.
La economía mundial tuvo un comportamiento positivo en 2017 con un crecimiento del 3,8% sustentado sobre una sincronía de la actividad a nivel global y el crecimiento del comercio internacional. Este crecimiento también tuvo su reflejo en la eurozona en la que el PIB alcanzó un registro del 2,5% y hubo una intensa creación de empleo alcanzando la tasa de paro un valor del 8,6%. En un entorno sin inflación y con unas condiciones financieras laxas, la demanda privada y el sector exterior tuvieron un buen comportamiento.
Este marco general también sirvió de base para que la economía española prolongase una trayectoria de crecimiento cuyos cimientos arrancan en las ganancias de competitividad habidas años atrás. Así, el crecimiento está siendo en general equilibrado, con aportación tanto de la demanda externa como de la interna.
En definitiva, 2017 ha sido un año de recuperación cíclica de forma que poco a poco se va cerrando el output gap en la economía.
Así, centrándonos en nuestro ámbito geográfico de referencia:
- El año 2017 el PIB de la CAPV se incrementa un 2,9%, cifra similar a las tasas de crecimiento habidas tanto en la Comunidad Foral de Navarra como en el conjunto del Estado, cuyos registros son del 3,2% y 3,1% respectivamente.
- Lo anterior hace que el comportamiento del mercado laboral sea positivo en los tres ámbitos geográficos, ya que el empleo crece un 0,3% en la CAPV, un 4,2% en Navarra y un 2,6% en el conjunto del Estado.
- En cuanto a la magnitud más influyente, la tasa de paro, se sitúa en el 11,3% en la CAPV, disminuyendo 1,3 puntos porcentuales con respecto a 2016, mientras que en la CF cae hasta el 10,2% y en España alcanza el 17,2%. La conclusión es que las tasas de paro comienzan a ceder el terreno ganado a lo largo de esta crisis y poco a poco se aproximan a sus valores naturales en la CAPV y la Comunidad Foral, aunque en el conjunto del Estado sigue siendo elevada.
- Desde la perspectiva de la oferta destaca que, salvo el sector agrícola en la CAPV, todos los sectores marcan registros de crecimiento positivos del valor añadido bruto.
PERSPECTIVAS 2018-2019
En lo que respecta a 2018 las expectativas contemplan la continuidad de la fase expansiva actual, algo que se aprecia con la información disponible del primer semestre. En cualquier caso también se espera cierta ralentización en la segunda parte del año en la que podrían afectar ciertos desarrollos que implican riesgos a la baja en el escenario central planteado.
El proceso de normalización de tipos en EEUU puede resultar una fuente de perturbaciones en los países emergentes dependiendo del ritmo y la intensidad de las subidas. Incluso el Banco Central Europeo inicia el viraje en política monetaria marcando un final para el programa de compra de activos e insinuando, así mismo, que los tipos podrían comenzar a subir a finales de 2019, siempre que no se ponga en riesgo la recuperación de la senda de inflación al nivel deseado del 2%. En cualquier caso, uno de los elementos que hasta ahora apoyaban el crecimiento, como era la política monetaria laxa, va a dejar de actuar como factor de impulso.
Pero quizá más preocupante resulta la ola de proteccionismo y guerras comerciales por el coste que ello supondrá en términos de PIB y empleo a nivel global. En este sentido hay que señalar que este tipo de cuestiones llevan a un incremento de la incertidumbre por las dificultades de medición de los efectos de dichas medidas. En definitiva, son acciones que se toman de manera cruzada entre varios países, pero en el contexto de las cadenas de producción globales los efectos se reparten de manera asimétrica entre países, sectores y empresas.
También es importante apuntar algunas otras cuestiones que tampoco son de importancia menor y que suponen riesgos como la crisis migratoria, el Brexit y su proceso de negociación, el gobierno italiano y su posicionamiento en determinadas cuestiones y, en el ámbito doméstico, el conflicto de Cataluña.
Con todo, con la información económica disponible al cierre de este informe, las expectativas son positivas para el año en curso con tasas de crecimiento en el entorno del 3% en España, CAPV y Comunidad Foral de Navarra. Y, si no se materializa ningún escenario de estrés, 2019 será un curso en el que las tasas pasarán a valores próximos al 2,5% en los tres ámbitos geográficos analizados.
En cualquier caso, lo positivo de las cifras apuntadas no debe hacer olvidar las debilidades de la economía en esta etapa de salida de la crisis. En este sentido, quizá el problema más acuciante sea el de la consolidación de las cuentas públicas. A pesar de que previsiblemente en 2018 el déficit baje de la barrera del 3%, el endeudamiento público es muy elevado y requiere de medidas adecuadas. Por otra parte el bajo crecimiento potencial que se estima para la economía requiere de medidas que favorezcan la mejora de la productividad y la reducción del paro estructural entre otras cuestiones.